La anorgasmia: el paraíso extraviado

Se puede decir que la anorgasmia femenina no es más que la dificultad o imposibilidad recurrente que tiene la mujer para lograr el orgasmo tras una fase de excitación normal, a esto también se le conoce como una disfunción sexual femenina (una de las más comunes) o como la popular impotencia sexual femenina. Pero, en otras palabras, la anorgasmia es la ausencia del orgasmo después de una estimulación regular, dicho esto, cabe destacar que este problema también se encuentra presente en las mujeres que tienen un deseo sexual normal, en este caso, el problema se despliega al final, cuando no logran llegar al clímax. Por tanto, debemos aclarar que la anorgasmia puede presentarse aunque el deseo sexual funcione adecuadamente.

anorgasmia

También es necesario exponer que no se trata de una enfermedad sino de una disfunción sexual y es una de las más frecuentes en los consultorios de psicólogos y sexólogos junto al vaginismo y la falta de apetito sexual. En este orden de ideas, dicha irregularidad tampoco debe confundirse con la frigidez, porque en estos casos, todas las mujeres frígidas son anorgásmicas pero no todas las féminas anorgásmicas son frígidas, debido a que estas últimas pueden disfrutar del acto sexual sin poder llegar al orgasmo. Otras de las notables diferencias con la frigidez es que esta última viene acompañada de la falta de deseo.

Por otra parte, es de aclarar que la anorgasmia también se presenta en el hombre, y al respecto, algunas personas conservan la falsa idea de que el orgasmo es igual a la eyaculación, sin embargo, esto no es más que un error común. Resulta que cuando ambos vienen acompañados, normalmente el orgasmo sucede unos segundos antes de eyacular, pero la anorgasmia se refiere más bien tanto a la imposibilidad del orgasmo como la de la eyaculación y esto conlleva inevitablemente a la frustración.

Tenemos que tener en cuenta que a lo largo de la vida, la mujer siente la ausencia del orgasmo por breves periodos de tiempo, conocidos también como lapsos que surgen como consecuencia de hechos importantes, por ejemplo: después de un parto en el que se haya producido algún daño físico, después de la ruptura de alguna relación sentimental, por graves problemas familiares o la pérdida de un ser querido. Si los acontecimientos anteriormente mencionados no son tratados adecuadamente, pueden repercutir en la vida sexual de una persona por un período de tiempo.

En estos casos, la pareja debe apoyar dichas dificultades y buscar ayuda en conjunto. Una actitud errada es exigir o reprender durante el encuentro sexual, las parejas deben tener en cuenta que esta es una situación que se supera en equipo, de lo contrario, el tratamiento no dará resultados óptimos. Sin embargo, es normal que los implicados se sientan desmotivados o humillados después de no conseguir el orgasmo.

Es de considerar también que el orgasmo varía de una persona a otra, es decir, cada individuo necesita un impulso distinto para generar la respuesta esperada. Por ende, esto dependerá exclusivamente de nuestra edad, de nuestro contexto y de la intensidad del estímulo que busque desencadenar el clímax de la excitación.

La buena noticia es que con una terapia efectiva, este problema puede corregirse en un período muy corto de tiempo, de igual modo, esto también dependerá de la capacidad del profesional que esté a cargo del tratamiento, al respecto, se sugiere usar los esquemas terapéuticos más modernos y eficaces que han demostrado ser los apropiados para conseguir resultados inmediatos.

Tipos de Anorgasmia

La anorgasmia comprende distintas clasificaciones o tipos:

Absoluta

Esta anorgasmia ocurre cuando la persona es incapaz de lograr el orgasmo, bien sea por masturbación o durante el acto sexual.

Relativa

Es la anorgasmia que sucede cuando únicamente la mujer experimenta el orgasmo de una forma en específica, por ejemplo, después de la masturbación.

Situacional

Ocurre cuando la mujer solo es capaz de sentir el orgasmo en situaciones determinadas.

Primaria

Es la anorgasmia que padecen aquellas personas que nunca han experimentado un orgasmo, bien sea por el acto sexual en pareja o individualmente, es decir, por la penetración o por la masturbación.

Secundaria

Este nivel de anorgasmia lo padecen aquellas personas que tras haber tenido una época de orgasmos placenteros, dejan de experimentarlos de un momento a otro sin razón aparente.

Causas de la anorgasmia

Sociales

Desde hace muchos años, la sociedad ha adoptado como un tabú el placer femenino, relegándolo injustamente y recriminándolo con connotaciones negativas. Así es como se ha ido obstaculizando el hecho de que la mujer pueda alcanzar el placer o el disfrute pleno de su sexualidad, por tanto, se han ido construyendo argumentos que estimulan los sentimientos de culpa que cohíben a la mujer de llegar al clímax, esto también podría deberse a la educación que la misma ha recibido.

Emocionales

Algunos estados como la depresión, el estrés y la ansiedad son factores trascendentales al momento de tener la relación sexual, entendiendo que dichas sensaciones afectan negativamente el acto sexual. Por esta razón, los especialistas aseguran que un ser humano debe estar relajado, sin presiones y sin prisa para poder disfrutar el sexo, y de este modo, poder alcanzar el orgasmo, de lo contrario, si la persona se exige demasiado puede ser contraproducente.

Comunicación y Pareja

En muchas ocasiones, cuando la estimulación sexual es inadecuada o cuando la falta de práctica y  conocimiento al respecto es visible, conllevan a que las actividades sexuales no sean las convenientes o las ideales para poder alcanzar el orgasmo, esto se debe también a la falta de comunicación de la pareja, al evitar decirse las cosas que no le satisfacen o que simplemente le incomodan. En el peor de los casos, los problemas de pareja también influyen en el acto sexual, si uno de los dos no se siente a gusto, ese hecho se verá reflejado en el momento.  Finalmente, la presión que pueda sentir una mujer con respecto a su pareja, también puede constituir una causa contundente.

Información

Esto quiere decir que la información que circula en la calle es determinante para la formación sexual de las personas, es decir, si algún contenido o dato inadecuado es difundido y llega a los oídos de un individuo, eso puede generar falsas creencias que dañen el acto sexual, e incluso, que logre generar en el ser humano el temor de experimentar el orgasmo.

Consumo de Sustancias

En el caso de los fármacos, el uso de antidepresivos o sedantes produce efectos nocivos en el acto sexual, impidiendo la concepción del orgasmo. En el caso de las drogas, el consumo de la cocaína, la heroína y la marihuana pueden producir severos daños en las relaciones sexuales. Por otra parte, el alcohol también es conocido por sus repercusiones en el ámbito sexual, generando en el hombre la disfunción eréctil, por ejemplo. Finalmente, los tratamientos con hormonas destruyen casi totalmente el deseo sexual, así como también los anticonceptivos implantados bajo la dermis inhibe la líbido. Dicho esto, es de aclarar que aunque la anorgasmia se respalde mayormente en causas psicológicas, los motivos orgánicos también son de gran importancia.

Enfermedades

Dependiendo del origen, bien sean ginecológicas o neurológicas, pueden dificultar el clímax del acto sexual. Algunas de estas enfermedades pueden ser: la diabetes, la esclerosis o aquellas que afectan directamente la médula espinal. Es importante mencionar que la mujer debe cuidar de sus músculos vaginales, debido a que son ellos los que motivan el orgasmo produciendo contracciones, de modo que si esta musculatura está dañada o debilitada, las contracciones no serían lo suficientemente intensas.

Clitoridectomía

Se trata de la ablación del clítoris, es decir, la extracción de los tejidos genitales de la mujer, y son realizados en algunos países por temas religiosos, culturales y sociales, sin necesidad de existir alguna causa médica. La intención de esta práctica es obstruir la capacidad femenina de llegar al orgasmo.

Identidad sexual

Cada persona necesita conocerse y definirse a sí misma, es decir, tener claro cuáles son sus gustos y de qué manera se excitan más rápido, por tanto, la lubricación femenina se da si la mujer se siente complacida, por este motivo, la sexualidad forma parte de la identidad de cada persona, y si ésta conoce claramente qué le gusta y cómo le gusta, más disfrutará el acto sexual.

Menopausia

Con la llegada de la menopausia, la mujer experimenta cambios hormonales muy fuertes que originan resequedad en la vagina, impidiendo la lubricación natural durante el sexo, es así como también puede generarse la anorgasmia. Pero esta situación tiene solución fácil y natural, en la actualidad existen lubricantes que ayudan a la mujer a alcanzar el orgasmo.

Autoestima

Este es un factor sumamente importante al momento del sexo, debido a que especialmente la mujer necesita sentirse deseada, y al mismo tiempo, desear a su pareja. En tanto, si no existe conexión o química entre los amantes, es prácticamente imposible que la mujer alcance el orgasmo durante el acto. Finalmente, es de aclarar que la mayoría de las causas son psicológicas y esto quiere decir que en un gran número de casos, la mujer realmente sufre de impotencia psicológica.

Síntomas y Diagnóstico de la anorgasmia

Tanto en la mujer como en el hombre, el primer y principal síntoma es la ausencia del orgasmo, o incluso, el retraso del mismo después de una excitación sexual natural. Es de recordar que la reacción de una mujer frente a la estimulación varía, dependiendo de la edad, experiencia y la persona que esté ejecutando dicha estimulación. Por otra parte, y de una forma genérica, el malestar y la dificultad en las relaciones interpersonales también es signo de anorgasmia.

Para finalmente diagnosticar el trastorno, es necesario hacer un examen físico. En caso de que la pareja detecte que el inicio del problema se relaciona con algún medicamento, se deben dirigir primeramente al profesional que lo prescribió. Asimismo, también será necesario realizar una entrevista conducida por un terapeuta sexual para aclarar y despejar algunas dudas, puesto que esta irregularidad trae consigo síntomas muy generales, siendo la ausencia del orgasmo el más preciso e importante.

Finalmente, concluimos que el correcto diagnóstico de la anorgasmia incluye: un historial médico completo que abarcará la historia sexual y antecedentes quirúrgicos que ayudarán a detectar la causa del problema, y como se mencionó anteriormente, un examen físico general que ayude a ubicar las causas físicas de la anorgasmia, quizás la zona genital también presente lesiones que entorpezcan el proceso.

Lo cierto es que durante la entrevista, el paciente debe estar preparado para responder las siguientes preguntas:

¿Cuándo tuviste tu primera relación sexual?
¿Desde hace cuanto tiempo estas presentando este problema?
¿Alguna vez ha experimentado un orgasmo?
De haberlo experimentado… Describa las circunstancias
¿Cómo o qué sientes al respecto?
¿Tu relación actual te llena sexualmente?
¿Usas anticonceptivos? ¿Cuáles?
¿Está tomando medicamentos, vitaminas o suplementos? ¿Cuáles?
¿Es usted un constante consumidor de alcohol o drogas?
¿Le han operado en sus órganos genitales?
¿Le han diagnosticado alguna condición médica?
¿Sufre de irregularidades o trastornos psicológicos?
¿Qué opina tu grupo familiar sobre el sexo?
¿Te han maltratado sexualmente?

Tratamiento de la anorgasmia

Si se tiene pareja, es conveniente ponerse de acuerdo con ella para asistir a la terapia sexual, esto debido a que la anorgasmia no es exclusivamente un problema de la mujer, al igual que otras disfunciones sexuales, depende en gran medida de la comunicación y la interacción en pareja y es así como aparecen distintas variables que influyen en cada uno de los síntomas. 

Este proceso dependerá del origen de la anorgasmia, y el profesional, después del diagnóstico, será el encargado de precisar la terapia más adecuada para un paciente en particular. Sin embargo, debido a que en la mayoría de los casos este trastorno es producido por irregularidades psíquicas, uno de los principales tratamientos será la terapia psicológica.

En principio, la anorgasmia deberá ser tratada por una buena educación sexual, la cual ayudará a entender cómo funciona la sexualidad, y además, ayudará a conocer las peculiaridades de nuestro cuerpo, todo esto con el objetivo de eliminar las barreras que generan las falsas ideas en torno al tema, y también para enseñarnos cómo llevar a cabo nuestras prácticas sexuales y poder disfrutarlos de la forma más satisfactoria.

Posteriormente, el profesional deberá realizar ejercicios graduales que comenzarán con la obtención del clímax a solas, es decir, mediante la masturbación para luego alcanzarlo con la respectiva pareja a través de las distintas prácticas sexuales. Entre las finalidades del tratamiento en general, se persigue que el paciente:

  • Conozca su cuerpo a solas
  • Descubra las sensaciones que le evocan las distintas prácticas
  •  Repare en las acciones que le dan más placer.
  • Disfrute de las caricias durante el acto sexual antes de tratar de alcanzar el orgasmo. A veces, la prisa les impide disfrutar de la relación en sí misma.
  • Cuide de la correcta estimulación del clítoris por ser el órgano sexual más sensible del cuerpo.
  • Tenga presente que el sexo no solamente es la penetración, sino que existen muchas prácticas sexuales que ayudan al disfrute.
  • Considere que durante la penetración se puede estimular el clítoris de otras formas.
  • Comunique a su pareja las cosas que agradan y estimulan, así como también las que no generan satisfacción. 
  • Estimule su imaginación con las fantasías eróticas para poder elevar el placer.

Por tanto, una de las terapias consiste en cambiar radicalmente el estilo de vida, corregir los problemas de relación con la pareja y combatir los factores de estrés diario, en este sentido, se recomienda:

-Masturbación dirigida: con la finalidad de conocer mejor tu cuerpo y comprender la propia anatomía, saber de qué manera nos gusta que nos toquen, por ende, conseguir un curso de actualización de anatomía genital podría ser de mucha ayuda o comprar vibradores y consoladores para descubrir qué tipo de contacto nos hace sentir mejor y así poder compartir los descubrimientos con la pareja.

-Cambiar las posiciones sexuales: especialmente durante el coito con el fin de estimular el clítoris. Existen posiciones que le permiten a la pareja tocarse suavemente para la estimulación. También se sugiere el uso de vibradores durante el sexo para desencadenar el orgasmo. Lo cierto es que una mujer que no ha tenido un orgasmo, probablemente no esté recibiendo la suficiente estimulación sexual, por ello, existe la posibilidad de que ella necesite una estimulación directa o indirecta de su propio clítoris. 

Terapia Sexual

Es absolutamente normal que una mujer se sienta nerviosa o avergonzada por asistir a una terapia sexual, pero resulta que al final los sexólogos o psicólogos especialistas en estos problemas sexuales son indispensables en el tratamiento de la anorgasmia. La misma se inicia con la educación sexual y la mejoría de la comunicación en pareja, con ejercicios que se pueden probar en casa, por ejemplo, el ejercicio para dirigir la mente a las sensaciones, que no son más que rutinas que muestran cómo tocar y producir mayor placer en tu pareja. La terapia sexual tiene el objetivo de dotar a la pareja de técnicas que le permitan disfrutar mejor del acto sexual gracias a las técnicas y comprender que el orgasmo no es una meta, sino un placer.

Ejercicios Kegel

Así como el gimnasio ejercita los músculos en las extremidades, el cuello, la espalda y el abdomen, los ejercicios Kegel son una rutina realizada para fortalecer el suelo pélvico, ese conjunto de músculos que se encuentran entre los glúteos, los muslos y la pelvis, y que además, se encargan de proporcionar fuerza a la parte baja del abdomen donde se ubican la vejiga y el útero.

Las principales características de estos ejercicios es que son sencillos, efectivos y benéficos para el ser humano, y que además, no se necesita invertir capital o pagar sesiones para poder realizarlo. Por tanto, lo único que exigen estos ejercicios es constancia y concentración para realizarlos adecuadamente. Se recomienda que al principio, el ginecólogo debe supervisar los ejercicios, una vez dominada la técnica, el paciente puede hacerlo individualmente.

Para controlar si los ejercicios se están realizando adecuadamente, solo es necesario colocar los dedos entre los músculos vaginales y ejecutar la contracción, es importante que se note la estrechez que se genera a voluntad. Si en dado caso, se producen molestias en el abdomen o en la espalda, esto quiere decir que se han tensado otras secciones, en tal circunstancia se debe mantener la relajación y la concentración lo más afinada posible.

Los pasos básicos son:

  1. Vaciar la vejiga
  2. Contraer los músculos de la vagina durante tres segundos, luego relajarlos, repetirlo 15 veces
  3. Tomar una pausa
  4. Contraer los músculos y relajarlos 20 veces rápidamente
  5. Imaginar que se sostiene algo con la vagina, mantener esa posición durante tres segundos y luego relajar, repetir diez veces.
  6. Imaginar que se lanza un objeto con la vagina, guardar esa posición durante tres segundos y repetirlo diez veces.
  7. Realizar esta rutina al menos tres veces por día durante cinco semanas.
  8. Una vez cumplida la primera etapa, comienza la segunda, en la que la mujer acostada en el piso, dobla las rodillas y coloca las plantas de los pies en contacto con el suelo.
  9. Los músculos del estómago y de la vagina se conservan en posición relajada.
  10. Imaginamos las paredes internas de la vagina y se contraen los músculos por 10 segundos. Es importante no presionar el estómago ni los glúteos.
  11. Se vuelven a contraer los músculos y se cuenta hasta 10. 

La anorgasmia podrá curarse siempre y cuando el paciente ayude al terapeuta y coopere con él, por esa razón, alrededor del 95% de los casos logran recuperarse con el tratamiento adecuado.


[chart data="95,5" labels="95% superan la anorgasmia|5% no superan la anorgasmia" colors="058DC7, 000000" bg="bg,s,FCFCFC" size="645x200" title="Con ayuda psicológica la mayoria de parejas superan la anorgasmia" type="pie" is3D="true" tooltip="true"]


Los objetivos del tratamiento también son: erradicar las actitudes negativas, reajustar los conceptos y prejuicios sobre la sexualidad y el orgasmo, mejorar la comunicación entre pareja y fortalecer las habilidades sexuales.

 

Psicoterapia vs Terapia Comportamental 

Mientras la psicoterapia tiende a durar varios meses o años, la terapia comportamental suele ser mucho más corta. En este sentido, si la anorgasmia tiene origen psicológico, lo más recomendable será aplicar la psicoterapia, mientras que si la anorgasmia se presenta como un problema sexual secundario, producto de otro trastorno mayor, será suficiente aplicar la terapia comportamental.

Al principio, el profesional deberá realizar entrevistas al paciente o a la pareja del paciente. Durante los primeros encuentros, se le deben informar a los entrevistados sobre la relación psicológica del problema y el papel que deben adoptar durante la terapia, en este sentido, el paciente posteriormente deberá identificar las sensaciones que anteceden al orgasmo para finalmente desinhibirse y disfrutar del placer de la relación sexual. 

Tratamiento médico de la anorgasmia

-Aunque las terapias hormonales no sean ideales ni una solución directa para la anorgasmia, podrían servir de ayuda.

-Cambiar o modificar los medicamentos que son conocidos por inhibir el orgasmo puede eliminar algunos síntomas.

-Aplicar el tratamiento de afecciones subyacentes, si existe alguna condición médica que obstaculice el orgasmo.

-Aplicar la terapia con estrógeno sistémico a través de píldoras o parches puedes ayudar en la función cerebral y en los niveles del estado de ánimo, ejerciendo resultados positivos durante la relación sexual

-Aplicar la terapia de estrógeno local de liberación lenta, esta por lo general viene en forma de anillo, supositorio o crema íntima que se unta en la vagina. Su finalidad sería aumentar el flujo de sangre y fortalecer el deseo, existe a su vez la posibilidad de combinar estrógeno y progesterona.

-Sugerir la terapia con testosterona en caso de que la terapia con estrógeno no esté ayudando, debido a que las hormonas masculinas producen cambios importantes en la función sexual de la mujer, como por ejemplo, ayudar a aumentar el orgasmo. Vale decir que la sustitución de testosterona en las mujeres no está aprobado por los organismos correspondientes, por tanto, es una terapia sumamente controversial. Dentro de los efectos secundarios negativos de esta terapia, podemos mencionar: el acné, el exceso de vello corporal y cambios radicales en el estado de ánimo. Al mismo tiempo, se recomienda prescribir testosterona en mujeres con bajos niveles de la misma, de igual modo, el profesional deberá vigilar de cerca la evolución y el desarrollo de la terapia para impedir efectos secundarios.

¿Cómo alcanzar el orgasmo?

En primer lugar, la mujer debe relajarse física y mentalmente, luego deberá disipar el miedo que siente al no alcanzar el orgasmo, debido a que esto genera ansiedad, y la ansiedad es uno de los factores que impide conseguir el orgasmo.

En segundo lugar, la mujer debe estar consciente de que el orgasmo es una reacción natural e involuntaria del cuerpo, en términos sencillos, si una persona desea desesperadamente tener un orgasmo, menos lo consigue, de este modo se sugiere eliminar los recuerdos que evoquen experiencias sexuales negativas.

En tercer lugar, la mujer debe tratar de experimentar el sexo como un acto totalmente placentero, mantener una visión positiva al respecto y gozar de un disfrute pleno.

Por último, la visualización es una técnica indispensable para alcanzar el orgasmo, dado que una vez que nos imaginemos teniendo relaciones sexuales y experimentando un orgasmo, es así como vivimos esta experiencia de un modo subjetivo que disminuye la predisposición para que se haga totalmente realidad.

¿Por qué tenemos que fortalecer nuestra vida sexual?

Finalmente, es necesario hacer énfasis en este punto, porque mejorar la vida sexual está repleto de ventajas, dentro de las cuales podemos mencionar:

  • Una buena actividad sexual disminuye el riesgo de enfermedades físicas y mentales.
  • Los hombres que mantienen relaciones tres veces a la semana, tienen un 50% menos de probabilidad de morir naturalmente. Del mismo modo, las mujeres que tienen relaciones sexuales una o dos veces por semana aumentan sus defensas en el organismo
  • Mejora el sistema y el flujo cardiovascular, evitando ataques al corazón.
  • Disminuye las posibilidades de contraer cáncer de mama en las mujeres.
  • Libera oxitocina y endorfina, las hormonas que alivian dolores y liberan.
  • Permite dormir mejor
  • Motiva la pérdida de peso y tonifica músculos
  • Mejora los niveles de ánimo, es antiestrés y antidepresivo.
  • Rejuvenece la piel 

 

Psicologos de México expertos en anorgasmia



Autor: © PSIGUIDE